12 de Septiembre, 2013
Queridos amigos y amigas,
Esta mañana fui arrestada por participar en un acto de desobediencia civil fuera de la Cámara de Representantes de los Estados Unidos junto a otras más de 100 mujeres que apoyan una reforma a las leyes migratorias, incluyendo migrantes, lideres comunitarios, aliados y defensores. El acto, organizado por la campaña “We Belong Together”, incluyó el número más grande, hasta la fecha, de mujeres indocumentadas que se sometieron voluntariamente a ser arrestadas. Juntas apelamos ante congresistas para que adopten una reforma migratoria integral e incluyente que trate a mujeres y niños de manera justa.
Como nueva mamá y defensora de los derechos de las mujeres, me solidarizo con las millones de mujeres migrantes quienes contribuyen cada día a mejorar la vida de muchas personas. También me solidarizo con las miles de mujeres migrantes valientes quienes son y han sido separadas de sus hijos e hijas por nuestras injustas leyes migratorias.
Desde hace años, nosotros en el Centro de los Derechos del Migrante, Inc. (CDM), nos hemos solidarizado y apoyado a trabajadoras migrantes. Por medio de nuestro Proyecto de Mujeres Migrantes (ProMuMi) apoyamos a mujeres en su lucha por defender sus derechos laborales y por denunciar la discriminación de género.
Dejé a mi recién nacido en casa con su padre para participar en esta acción tan importante. Yo sé que los veré pronto, pero muchas madres migrantes no pueden tener esta certeza. Es hora de crear un sistema migratorio que mantenga unidas a las familias.
En solidaridad,
Mónica Ramírez
Subdirectora
Centro de los Derechos del Migrante, Inc. (CDM)